Soy Srqpo –pronúnciese, Ese-erre-cu-po en vuestro idioma español–. Creo recordarás que soy un “discípulo”, como diríais vosotros, de tu alienígena amigo Zyxwvut, ahora descansando en la colonia de Alpha del Centauro de nuestro planetoide artificial.
Por ahora, y no sé si durante mucho o poco tiempo, Zyxwvut no piensa regresar a la Tierra, pues lo que ha visto y experimentado de vuestra “civilización” –así, entre comillas-, y vuestras formas de vida lo han dejado exhausto y casi destrozado anímicamente, sobre todo porque dice no entender cómo una especie dotada de cierta inteligencia racional, capaz de comprender bastantes de las leyes de la Naturaleza y lograr avances incluso espectaculares en los ámbitos científico-técnicos, sea a la vez tan torpe para lograr progreso alguno en sus formas de organización social y política. Una especie, la vuestra, que es incapaz de vivir y convivir de manera armónica y placentera o feliz, usando vuestros propios términos, aun cuando los medios y bienes materiales de vuestro Planeta, bastan para satisfacer todas las necesidades de una población varias veces superior a la actual durante tiempo indefinido, de ser producidos y utilizados en forma lógica y racional.
Zyxwvut, me ha transmitido todo lo que le ha sido posible sobre vuestra especie y sus extrañísimas maneras de vida y organización. No me es posible creer todo lo transmitido y me dispongo, durante cierto tiempo, a comprobar in situ y por mí mismo las informaciones del respetable ingeniero exobiólogo. Y para no dispersarme, me voy a concentrar en establecer tan solo contacto con su amigo Patalete –que en lo sucesivo, espero lo sea también mío– y su extraño país, llamado España o Hispanistán por muchos de los que escriben en un periódico, Ácratas, el menos ilógico de vuestros medios de información –dígase con propiedad de desinformación– oficiales u oficiosos.
Y bien: a Patalete, o a cualquiera de los mejor informados de acratas.net, voy a exponer unos cuantos puntos de lo que llevo aprehendido, que no aprendido, sobre cuestiones de candente actualidad en vuestro país. A ver si llego a entender algunas abstrusas cuestiones, para mi ahora verdaderamente ininteligibles:
Según las noticias de los últimos días, se ha producido un hecho relevante en vuestra situación económica que, desde hace algunos años, se ha sumergido en lo que llamáis generalmente “crisis”. Un “ente” financiero, denominado Banco Central Europeo, ha acudido al llamado “rescate” de otros varios “entes” financieros españoles, también llamados bancos, mediante un préstamo económico de cien mil millones de euros, vuestra actual moneda.
Bien. Si se supone que ese préstamo se realiza, como sería lógico según lo aprehendido por mi, en moneda cierta de valor real en vuestro extraño planeta, es decir, en metal de oro, calculado su valor actual a cuarenta mil euros el Kg., supondría un volumen o peso de dos millones quinientos mil Kg, o dos mil quinientas toneladas. Serían necesarios doscientos cincuenta camiones de diez toneladas, o su equivalente en otros vehículos de mayor tonelaje, para su transporte desde la sede o almacenes del BCE, hasta los almacenes de los entes bancarios necesitados del préstamo.
Si se hace en papel moneda, en billetes de quinientos euros de un gramo de peso por billete, serían necesarios doscientos millones de billetes, y todavía con un peso de doscientos mil Kg., o doscientas toneladas. Aún serán necesarios veinte camiones de diez toneladas de carga, para trasladar la ingente masa de billetes de banco desde la sede o almacén del BCE hasta los de los bancos españoles receptores.
Y me pregunto u os pregunto a vosotros: ¿Existe esa cantidad de dinero-oro real (de la que los billetes impresos son únicamente “vales” del portador para que se le entregue el oro representado en el vale) para que pueda ser prestada por el BCE a los bancos españoles? . En su caso, ¿estan impresos y se les da traslado los billetes desde el BCE hasta España? .¿O bien el “Ente” bancario europeo autoriza su impresión en España, con papel español en la fabrica de la moneda? Tanto si los billetes son del BCE como si se fabrican en España, ¿qué bienes reales, ciertos y tangibles son los que respaldan el valor, de los “vales” de papel? ¿ O es que quizá ni siquiera se presten esos billetes de papel? No sé, no sé, espero respuestas.
También he aprehendido que tan enorme cantidad de masa monetaria, es un “crédito blando” a devolver en quince años a un interés del tres por ciento. Que irá destinado a “re-capitalizar” un tercio de los entes bancarios españoles a los que una desastrosa gestión los ha “des-capitalizado durante los últimos años de pre-crisis y crisis. Por tanto, no irá destinada a la economía productiva real, ni a las empresas productoras de bienes tangibles y necesarios.
Mas, en tal caso, ¿a qué o quiénes sirve esa ingente cantidad dineraria? Y si se ha de devolver en quince años al tres por ciento de interés adicional, eso quiere decir que los entes bancarios receptores ¿han de devolver en el primer año, un quinceavo de lo recibido, es decir, seis mil seiscientos sesenta y seis millones aproximadamente que con el interés de los cien mil millones se aproxima a los diez mil millones de devolución?
Mas también he creído aprehender según vuestros medios, que tal ”préstamo blando” no lo concede el BCE a los entes bancarios españoles, sino al “súper-ente” que llaman “Estado Español”, por lo que debo seguir preguntando: ¿Significa ello que no son los entes bancarios receptores del capital, sino el Estado el obligado a responder de la deuda y de su devolución al acreedor en los términos que ni siquiera se conocen realmente?
Esto parece imposible por lo descabellado e irracional, pues, si se tiene en cuenta que los altos gestores y prebostes de los entes bancarios re-capitalizados son los mismos o similares especímenes individuales, las mismas personas físicas gestionando a los mismos entes o personas jurídicas, los que los llevaron a la bancarrota y quiebra reales, nada descabellado es suponer –más aún presumir–, que estos mismos individuos, dirigiendo los re-capitalizados bancos, serán capaces, muy capaces ¡otra vez!, de hundirlos en la miseria.
Y os hago dos nuevas y últimas preguntas, ¿Cómo es posible que sea el Estado, en realidad los cincuenta millones de españoles, contando a los “nasciturus” hasta el año 2027, en que finaliza el plazo de devolución de la deuda, los que deban responder de los desmanes de una serie de individuos, muy pocos numéricamente frente al grueso de la población? Y finalmente, la última: ¿Cómo es posible que los actuales 46 millones de ciudadanos españoles no reaccionen como una sola persona y ejerzan acciones contra esta pequeña en número, pero extraordinariamente nociva y peligrosa, especie de individuos que los sumen en la miseria, el paro y la desesperación?.
Notad que ni siquiera harían falta acciones violentas o irracionales, pues que en vuestras leyes están contemplados los castigos de los delincuentes. Solo hace falta poner de forma manifiesta y clara quienes lo son. Y no es difícil. ¡Ejerced la acción penal popular varios millones de afectados!. Es legal, es justo, es ético. Pero sobre todo: os es imprescindible y necesario. ¿Sabéis qué ocurriría si tuvierais voluntad clara de hacer lo que es vuestro deber de individuos racionales? Pensad, pensad, terrícolas.
Porque lo cierto es que un individuo alienígena, recién llegado a la Tierra como yo, no puede entender cómo es posible que hayáis llegado a situaciones tan monstruosas y descabelladas, mucho más descabelladas que mis preguntas. Que, por cierto, espero de algunos que las respondáis. Porque estoy en periodo de aprendizaje.
Os saluda cordial y expectante,
SRQPO
(Por la transcripción: PATALETE)
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